En su día fueron Atenas, Venecia o Milán. Hoy son São Paulo, Shanghái, Estambul o Barcelona. Grandes ciudades que firman acuerdos diplomáticos internacionales directamente con otros gobiernos, locales o nacionales, sin pasar necesariamente por sus capitales. Los alcaldes o los gobernadores son así los nuevos diplomáticos. “Mientras las naciones hablan, las ciudades actúan”, ha dicho el ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg. “Las ciudades son el gorila en la habitación de los estudios internacionales”, ha escrito Michele Acuto, especialista en el futuro de las urbes de la Universidad de Oxford.
